Cómo Cultivar Ajo en el Huerto Urbano
El ajo es una de las plantas medicinales más utilizadas en la historia de la humanidad por sus numerosas propiedades terapéuticas. En este artículo te mostramos qué cuidados necesita el cultivo de ajo y cómo puedes beneficiarte de sus cualidades en la cocina y en el propio huerto.
El ajo es originario de Asia pero se cultiva en todo mundo. De hecho, es una de las plantas más utilizadas por la humanidad, no solo por sus características culinarias, sino también por sus propiedades medicinales y como insecticida y antiparasitario en los cultivos de otras plantas.
Se trata de una planta herbácea muy dinámica que puede alcanzar los 80cm de altura, y que no necesita espacios específicos dentro del huerto urbano, pues la podemos sembrar alrededor de otras plantas para protegerlas de insectos y parásitos y para estimular el correcto desarrollo de sus frutos.
Cómo preparar el cultivo de ajo en el huerto urbano
La planta del ajo es muy amigable y no necesita unos cuidados muy rigurosos, aunque sí los imprescindibles. Es suficiente con tener en cuenta algunas de sus necesidades específicas:
Resistente a la temperatura: Aunque crece mejor en ambientes cálidos, soporta bien cualquier temperatura. Cuando se cultiva en climas más fríos suele tener un sabor más picante.
Buen sustrato: Necesita una buena base de sustrato rica en humus.
Riego moderado: Requiere un riego moderado y espaciado, ya que los encharcamientos no le sientan nada bien a las raíces. En realidad, aunque con tierra áridas crecen ajos más pequeños de volumen, tienen más propiedades terapéuticas que los recogidos de tierra húmedas en exceso.
Resistente a las plagas: El ajo no suele tener problemas de plagas o ataques parasitarios, ya que es en sí un poderoso insecticida.
Nunca después de…: En la rotación de cultivo, no siembres ajo en la tierra donde antes se haya cultivado ajo o cebolla (o cualquiera de la familia de las Liliáceas), remolacha, alfalfa, guisantes, uva, espinacas o habas.
Mejor después de…: La tierra preferida para cultivar ajo es la posterior al cultivo de cereales, patata, col, lechuga y pimiento.
Cómo sembrar ajo en el huerto urbano
Dientes de ajo de calidad: Elige los dientes de ajo más lustrosos que encuentres y procura que no tengan defectos de color o forma.
Enterrarlos por la mitad: Para sembrar el ajo basta con enterrar hasta la mitad o dos tercios el diente de ajo, con la parte plana dentro de la tierra y la punta hacia el cielo
10 cm de distancia: Se debe dejar un espacio de unos 10 cm entre el ajo y cualquier otra planta. De hecho, lo mejor es cultivarlo entre otras plantas para protegerlas de plagas y fortalecer sus defensas.
Luna menguante: El mejor ciclo lunar para cultivar el ajo es durante una etapa de luna menguante
Temporada: Si vas a cultivar para recoger ajos tiernos, mejor sembrarlos de mayo a octubre. Si vas a cultivar ajos en grano y vives en una zona seca, de octubre a enero. Pero si vives en una zona húmeda, mejor sembrarlos de enero a marzo.
Macetas de 3 litros: Si vas a sembrarlo en una maceta procura que tenga, al menos 3 litros de capacidad.
Cómo cuidar el cultivo de ajo
El ajo no requiere unos cuidados exquisitos, pero sí es importante tener en cuenta que:
Le gusta mucho el sol
No le gusta nada el encharcamiento, ya que los suelos demasiado húmedos favorecerán la aparición de hongos.
Si aparece floración en el ajo es mejor cortarla para que la planta concentre sus energías en el desarrollo del diente de ajo.
Cómo recolectar el ajo
Si los vas a consumir como ajos tiernos, el momento de cogerlos es cuando la planta haya alcanzado su máxima altura, alrededor de 50 cm o más.
Si los vas a consumir secos (dientes de ajo), entonces debes esperar a que se sequen las hojas. El mejor momento es durante los días de luna llena, y simplemente hay que arrancar la planta de raíz.
Propiedades medicinales del ajo
Como ves, cultivar ajos no requiere unos cuidados delicados ni mucho menos. Se trata de una planta bastante amigable y resistente que te proporcionará condimento culinario y cualidades medicinales en tu botiquín natural, además de ayudar a otras plantas de tu cultivo urbano y protegerlas frente a plagas y enfermedades.
Estas son algunas de las propiedades medicinales del ajo
Regula los niveles de colesterol HDL y LDL
Disminuye la presión arterial
Es un gran aliado del corazón
Es un poderoso antibiótico
Mejora los cuadros de bronquitis, gripe, resfriado, etc.
Es depurador del sistema digestivo e intestinal
Remedia las afecciones urinarias
Regula los niveles de azúcar en sangre (diabéticos)
Es uno de los mejores antisépticos naturales
Purifica la sangre y la hace más fluida
Es anticancerígeno
Es antiinflamatorio
Previene la arteriosclerosis
Es analgésico